Hasta hace poco, para llevar a cabo cualquier proyecto que necesitase una financiación las opciones para conseguirla eran limitadas, se podía recurrir al banco solicitando un préstamo, recurrir a subvenciones o contar con la ayuda de amigos y familiares, sin embargo, cada vez está más presente el empleo de la financiación colectiva o micromecenazgo con plataformas online de crowdfunding para conseguir la inversión necesaria. La búsqueda de financiación entre el público, de hecho, se ha empleado en una gran cantidad de proyectos culturales que se han promovido gracias a la financiación de todos los ciudadanos, como el caso de numerosos museos que se han animado a recurrir a este sistema para adquirir obras de arte o realizar restauraciones.
Retrato de niña con paloma, Simon Vouet, adquirida por el Museo del Prado gracias al crowdfunding
Si este término te resulta nuevo, te explicamos qué es. El crowdfunding o micromecenazgo en español, se trata de una red de financiación colectiva en la que, normalmente a través de plataformas online, el público realiza donaciones económicas con las que se consigue financiar un determinado proyecto. Dependiendo del tipo de crowdfunding las contraprestaciones a los participantes son diversas: de manera altruista, con recompensas, acciones, royalties, etc., además de las debidas deducciones fiscales por donación.
Como decíamos, el crowdfunding se está convirtiendo en una vía para financiar acciones relacionadas con museos, desde organización de exposiciones, adquisición de obras o restauraciones o incluso para la creación de nuevos espacios. Cada vez son más los proyectos culturales y artísticos que buscan la aportación de la comunidad para salir adelante, a continuación mencionaremos algunos de los más recientes o destacables.
MICROMECENAZGO EN EL MUSEO DEL PRADO
Recientemente el Museo del Prado se sumaba a esta tendencia y así, en su última campaña bautizada por la propia pinacoteca como Súmate al Prado, buscaban una recaudación de 200.000 para poder adquirir la obra del pintor francés del siglo XVII Simon Vouet, "Retrato de niña con paloma", cuya protagonista parece ser la misma niña, ya hecha una mujer, que aparece en la obra del mismo pintor "El Tiempo vencido por la Esperanza y la Belleza", que ya se exponía en el Museo.
Gracias a esta primera campaña de micromecenazgo, con una aportación mínima de 5 por persona, el Museo del Prado ha adquirido este retrato inédito consiguiendo una donación total de 204.713,10 en la que han participado 6456 personas.
Retrato de niña con paloma, Simon Vouet
MICROMECENAZGO EN EL MUSEO THYSSENBORNEMISZA
De igual modo, otro de los museos más importantes del panorama nacional, el Museo Thyssen-Bornemisza acudía a este medio de recaudación para llevar a cabo la restauración y estudio técnico de la obra "La Plaza de San Marcos en Venecia", de Canaletto.
La obra fue dividida simbólicamente en 1000 fragmentos para que cada participante, con una donación de 35, apadrinase uno de estos fragmentos haciendo así posible la financiación de su restauración. En total con esta campaña el Museo logró recaudar un total de 54.335 frente a los 35.000 necesarios, gracias a la participación de 606 participantes.
La plaza de San Marcos en Venecia, Canaletto
Son muchos los casos conocidos de instituciones artísticas recurrentes a este tipo de financiación, ya en 2015 el Museo Sorolla de Madrid llevaba a cabo una recaudación para adquirir la obra "Almendro en flor" del artista valorada en 43.000 o el caso del Museo parisino El Louvre quien lograba el pasado febrero recaudar los 9 millones de euros en los que estaba tasado un libro del rey francés Francisco I (s.XVI) gracias a la contribución del grupo de lujo LVMH y a una campaña de "crowdfunding".
Almendro en flor, Sorolla.
El Libro de Horas de Francisco I
¿Qué os parece esta técnica de recaudación y su uso por parte de instituciones de arte?
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